jueves, 30 de mayo de 2013

Je meurs votre ami.

30 Mai, 1832.

Lo despertó un rostro que le miraba horrorizado y un dolor ciego en el vientre. Sintió la clara luz de la  primavera filtrándose a través de sus párpados. Évariste recordó por qué este despertar era distinto a todos los demás.  Se había herido con el honor, un arma cuya empuñadura hace sangrar más que su filo. La ironía era la operación que regía su destino: descubrir la elegante belleza de un grupo de operaciones abstractas, solo para morir a manos de una mundana relación irreflexiva, tristemente anti-simétrica y mortalmente intransitiva.

ChD.

jueves, 9 de mayo de 2013

10-05-13

No salva del olvido
La memoria solícita y la infinita biblioteca
en cuya vastedad reside su insignificacia.

No salva de la corrupción
La idea altiva y el adjetivo idólatra
que se esgrimen como espadas de cera.

No salva del dolor
Tratar de fabricarse uno a la medida.

No salva el ser temerario
de no pensar alguna vez en ser salvado.

No salva el amor verdadero
del amor real.

No salva la fiel derrota
del albur del próximo sueño.

ChD.